Las personas implicadas administraban, entregaban y controlaban el funcionamiento de las tarjetas desde donde se desviaban los fondos.
Una organización delictiva que estafó al gobierno provincial en millones de pesos a partir del desvío de fondos destinados a la carga de combustibles para autos oficiales fue desarticulada tras seis allanamientos realizados por la Policía de la provincia de Buenos Aires en viviendas de La Plata, Berisso y Ensenada.
El procedimiento realizado ayer por efectivos de la Superintendencia de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas y Crimen Organizado, dependiente del ministerio de Seguridad bonaerense, contó con la colaboración de las máximas autoridades de la Dirección General de Cultura y Educación, lo que facilitó el desmantelamiento de la organización desde su cúpula.
“El trabajo llevado adelante por el personal policial en esta investigación que permitió desarmar esta banda delictiva que venía estafando al Estado provincial y de esta forma a los ciudadanos”, remarcó en declaraciones a la prensa hoy el titular de la cartera de Seguridad provincial, Cristian Ritondo.
Durante los procedimientos, seis en total, fueron detenidas dos personas de 47 y 57 años, ambos con cargos de jefes de departamento dentro de la cartera educativa provincial, quienes quedaron a disposición de la justicia acusados de “asociación ilícita y malversación de caudales públicos”.
En los operativos, la policía incautó un yate, un motor home, cuatriciclos, motos de agua, motos de alta cilindrada y automóviles, entre ellos varios de alta gama, y un arma.
La causa se inició en abril pasado cuando la policía detuvo a un hombre (playero de una estación de servicio) cuando circulaba por la ruta 36 y calle 44, y en su poder se decomisó dinero en efectivo y tarjetas de débito de la Dirección General de Cultura y Educación bonaerense (DGCyE).
Luego de esa captura, el encargado de la estación Axion ubicada en 44 y 31 -donde también trabajaba el sujeto detenido horas antes- se suicidó en el baño de ese comercio.
Ante la sospecha que desde allí se realizaban maniobras fraudulentas se inició una investigación y se comprobó que funcionarios y empleados de la administración pública provincial –pertenecientes a la DGCyE- desviaban periódicamente fondos públicos a partir de falsas compras de combustibles para vehículos oficiales, y que, varias de las tarjetas correspondían a autos que estaban en desuso, ya que no habían sido dados de baja y se encontraban guardados en galpones.
Ante eso, la investigación recayó, entre otras personas sobre el Director de Servicios Generales, el Sub Director de Transporte Terrestre, el Jefe de Movilidad y el coordinador del área de Combustibles, todos ellos funcionarios de la Dirección General de Cultura y Educación.
Según los investigadores, las personas implicadas, desde los cargos que ocupaban, eran las encargadas de administrar, entregar y controlar el normal funcionamiento de las tarjetas desde donde se desviaban los fondos.
Para la justicia, esos hechos fueron realizados desde 2014 en forma organizada y planeada, con distribución de roles, y se estima que los gastos de esas tarjetas ascendían en forma semanal entre 250.000 a 1.000.000 de pesos.
El fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta solicitó se embarguen los bienes de los investigados, hasta tanto se compruebe el monto total sustraído, y la investigación continuará en la UFI N° 16 y el Juzgado de Garantías N° 5, de Marcela Garmendia, del Departamento Judicial La Plata.